¡SOS!
Rajoy vuelve al trabajo. Vuelven las oscuras golondrinas de los
viernes negros en las próximas semanas trágicas que nos propone
para el próximo otoño-invierno el gobierno del PP. Y sobre la mesa
del despacho se encontrarán asuntos de enorme trascendencia para el
futuro inmediato del pueblo español, entre los más destacables se
encuentran: “La reforma del sistema financiero. Las prorroga del
Plan PREPARA y sus nuevas condiciones. O, lo que vienen a denominar
rescate suave de España, como si un rescate solicitado al mercado
secundario -bancos- gozara de suavidad en las condiciones de pago”.
Todos
los asuntos pendientes tienen como común denominador el argumento de
que <España ha gastado más de lo que tiene y que se ha vivido
por encima de las posibilidades>, germen que les sirve para
alimentar una trazabilidad recurrente para los verdaderos objetivos
del gobierno del PP y que no son otros, que cambiar el modelo social
del Estado y el compendio de derechos consagrados tras los logros del
conjunto de la sociedad española.
Decir
que España ha gastado más de lo que tiene es un disparate
económico, y quien lo afirma pone de manifiesto un profundo
desconocimiento en economía o muy malas artes e intenciones, amén
de su incapacidad como gobierno económico según todos los expertos
y analistas independientes.
Si
hubiéramos gastado más de lo que tenemos o hubiéramos vivido por
encima de nuestras posibilidades, nuestro déficit público no sería
inferior (muy inferior según qué casos) al de Alemania, Francia,
Italia, Gran Bretaña, … y por supuesto Grecia o Portugal, y a
ningún mandatario de esos países se les oye la reiteración
permanente al gasto excesivo como evasión a su responsabilidad. Al
gobierno del PP “sí” se le oye porque con ello pretenden generar
un sentimiento de culpabilidad colectiva que les exima de sus
responsabilidades e incompetencias políticas y de su permanente
improvisación en todas sus acciones y decisiones de cada viernes
negro.
Para
darnos cuenta de que la política, especialmente la económica, les
importa un pimiento, baste recordar cómo comienza el gobierno del PP
la legislatura ocho meses atrás; bajan los impuestos y rescatan la
desgravación del gasto por vivienda habitual. ¿Y por donde van
ahora? “Suben los impuestos directos e indirectos, no una sino
dos veces y retiran el desgravamen y la ayuda al alquiler de la
vivienda a los jóvenes pensado para su emancipación” . Por
cierto, a los mismo jóvenes que ahora pretenden quitarles la ayuda
del PREPARA sino están emancipados de sus familias.
Acciones
todas ellas que forman parte de la ceremonia de la confusión a la
que pretenden someter al pueblo. Acciones que forman parte de la
estrategia del doble discurso de la derecha para confundir a la
ciudadanía y de ese modo desacreditar a la política, un ámbito en
el que la derecha de este país representada por el PP se encuentra
muy cómoda porque total; “todos los políticos son
iguales y para qué votar”.
De esta manera degradan a la democracia y hasta la reducen como
pretenden con las propuestas de reducir el 30% la representación
pública municipal y terminar con las entidades locales menores y los
pequeños municipios.
Lo
importante, lo único importante para el gobierno del PP es la
economía, que las cuentas salgan, no lo es la felicidad de la gente,
no lo es el que la gente se sienta libre pensadora y expresadora y no
lo es el sentirse libremente representado por quienes cada uno estime
conveniente en nuestro actual modelo de Estado social, democrático y
de derecho en el que no creen.
