Un mes más, y por tercero consecutivo, los datos del paro registrado en el SPE (INEM) vuelven a castigar a Huelva, y a poner de manifiesto la debilidad del mercado laboral onubense.
Un incremento de 2.515 personas paradas, el 4,07% más que el mes septiembre contrasta claramente con el 3,05% de incremento respecto al mes anterior de Andalucía y del 2,72% de España, lo que convierte a Octubre en un mes negro para el empleo en Huelva.
Son 6.133 los empleos estructurales que ha perdido Huelva desde octubre del año pasado, un 10,54%, y 16.171 los perdidos desde que comenzara la crisis en 2009 y que muy difícilmente podrán recuperarse cuando comience el crecimiento económico, máxime cuando a las puertas de nuestra realidad sociolaboral se encuentran los despidos masivos del personal laboral en las administraciones públicas.
Si preocupante son los datos del paro de octubre, no menos lo son los de caída de prestaciones contributivas que vuelven a bajar y dejan sin prestación contributiva a 1.846 personas desempleadas que formarán parte de nuevos/as parados/as de larga duración, constituyendo éstos el 38,64% de los demandantes de empleo. Estos datos ponen muy a las claras que cada vez hay menos gente cobrando prestaciones contributivas, lo que sumado a la caída de los salarios medios, al cada vez más precario mercado laboral y a los recortes en las prestaciones por desempleo, se les avoca a las personas pardas a tener que refugiarse en la economía sumergida para poder sobrevivir.
Igual de significativo es la evolución en la contratación. Es paradójico que habiéndose producido un incremento considerable en la contratación de octubre respecto a septiembre, vuelva a caer la contratación indefinida al 1,63% y a primar la contratación temporal al 98,37%, lo que da a entender que la legislación laboral no es el problema, el problema está en el modelo productivo y en la cultura empresarial a la cual, ni la reforma laboral le sirve. Esta es la realidad del mercado laboral onubense y de su tejido empresarial “que solo piensa en el negocio y en el empleo barato en vez de hacer una apuesta por un mercado productivo sostenible”.
Con las políticas de ajustes económicos basadas en la austeridad malentendida. Con las políticas de recortes como única alternativa al control del déficit, el gobierno del PP nos va a llevar a una espiral sociolaboral y socioeconómica sin retorno, donde las clases trabajadoras cada vez serán más pobres, trabajarán más y serán más productivas para incrementar los beneficios empresariales en claro contrate con una sociedad cada vez más pobre y más necesitada, tal como se desprende del alarmante desplome del sector servicios que en octubre representa el 52,65% del total paro registrado en Huelva. Un sector productivo directamente vinculado con el bienestar y con el consumo interno, precisamente donde más recortes está aplicando el gobierno del PP.
Es necesario un cambio de actitud de toda la ciudadanía para que el gobierno cambie sus políticas de pasividad ante el desempleo, que sigue subiendo y las expectativas para lo que queda de año son igual de nefastas ya que no hay ningún tipo de política que realmente estimule la creación de empleo, además los recortes afectan de forma muy negativa a una población que cada vez está siendo más castigada con subidas de impuestos y bajadas de salarios.
La población sigue una tendencia hacia la pobreza de forma resignada que sólo conduce a la marginación y al aumento de la rabia indiscriminada.
Es necesario un rescate hacia la ciudadanía y no hacia la banca que aún sigue especulando y reteniendo los créditos a empresas y al consumo.
Reforcemos el llamamiento a la movilización y a la Huelga general el 14 de Noviembre, porque ya basta de políticas ineficaces que sólo distorsionan a la demanda y empobrecen a la población
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